Centro Veterinario V Centenario

Yo llevo a mis mascotas y las tratan muy bien. Aunque hace unos días un amigo adopto un perro, lo llevamos y en chico nuevo no supo ponerle ni el chip ni las vacunas porque el perro se puso un poco nervioso, la verdad que me sorprendió

Los mejores profesionales de la provincia con diferencia.

Excelente clínica,,me atendió Marta me esplico todo muy bien...muy buenos precios

Magníficos profesionales y un un trato a los animales excelentes.Lo recomiendo totalmente

Hace 2 años llevé a mi perro con el diagnóstico de que se había comido un trozo de tela, sugiriéndole a la persona que me atendió (un tal Juan) que le hiciéramos una ecografía. No sé si por arrogancia, falta de experiencia o ineptitud, me dice que NO, que le haríamos una radiografía. Siendo él el supuesto profesional, no le iba yo a debatir qué hacer (cosa que le costó la vida a mi perro). Se le hizo la radiografía y evidentemente no se pudo ver si estaba obstruido o no. Me dice que vuelva 2 días después según mejorara o no. Le receta algún medicamento, de los cuales, después de pedir segundas y terceras opiniones profesionales, uno de ellos no era aconsejable para un perro en ese estado. A los 2 días volví sin mejoras, con el perro sin comer, bebiendo apenas agua y sin expulsar el trozo de tela. Le vuelvo a sugerir la ecografía y me vuelve a decir que NO, que esta vez le haríamos una radiografía con contraste, un líquido que se le aplica para poder resaltar mejor el interior. Después de casi 2 horas y varias radiografías, sigue sin verse nada claro. Finalmente, la siguiente opción es la dichosa ecografía. ¿La sorpresa? El líquido de contraste es incompatible con la ecografía, por lo tanto, es imposible realizarla (hay que ser incompetente, por no decir otra cosa) Me vuelve a decir que vuelva el miércoles, 2 días más. Ese mismo día, sobre las 22:30, empieza con temblores en la cabeza. Llamo de urgencias y la respuesta: Que si es necesario llevar al perro a la clínica, que seguramente sería malestar y que le diera omeprazol y medio ibuprofeno, Después de 2 días más sufriendo, en los que el perro sigue sin comer ni beber y cada vez más apagado, vuelvo a llevarlo para que finalmente Marta le haga la ecografía, donde se pudo ver claramente la obstrucción que ya se suponía. Ahora toca operarlo. Como era de esperar, después de casi 1 semana sin comer, estaba muy débil y había que inyectarle suero o algún suplemento. Las opciones eran abrirlo o extraer el trozo de tela mediante un endoscopio y unas pinzas Busqué una clínica con endoscopia, ya que ellos no tenían, pero me aconsejaron y me derivaron a una clínica de confianza con la que suelen trabajar. Dejé a Duque para la intervención y lo recogí 6 horas después, supuestamente fuera de peligro. Una vez en casa, empieza a jadear agonizando, Vuelvo a llamar de urgencias sobre las 22 y la misma pregunta: ¿Es necesario llevarlo…? Llegamos a la clínica en 4 minutos, teniéndole que practicar RCP para intentar mantenerlo con vida, Después de otros 10 minutos tengo que volver a llamar, y evidentemente ya no se podía hacer nada. Para colmo, el tal Juan me llama para decirme que lo siente, y cuando le digo que deberíamos haberle hecho la ecografía y actuar antes, me responde que no, que se hizo todo correctamente, con el tono arrogante y prepotente de siempre. Los errores pasan,pero hay que ser mas humilde y saber los límites de cada uno La única persona que mostró al menos empatía con la situación fue Marta, aunque deberia supervisar más al personal que no esté suficientemente cualificado o carezca de competencia, sabiendo además que no es un caso puntual.